martes, 23 de junio de 2020

NueVa NoRMaLiDaD II…



Y continuamos para bingo, así q aproveché la nueva normalidad para ir quedando con mis queridos amiguitos. En la foto con Sergio (si, es Sergio y no Humberto Janeiro) y Lauris, q hacía un montón q no la veía físicamente, aunque es verdad q durante el confinamiento hablamos algunas veces a través de las videollamadas, tan típicas en aquellos días para todos nosotros

Quedamos primero en la terraza trasera del Kuore, donde Sergio se bebió su “Aquarius” en menos de 10 minutos… El chico tenía sed, no pasa nada, q le vamos a hacer. Mientras llegaba Lauris estuvimos hablando y poniéndonos al día. Cuando Lauris llegó, nos invitó a un postre q había realizado su madre, un “tupper” con 3 leche frita. Yo no soy muy fan de este postre, pero lo probé. Sergio me dio un mordisquito, pero estaba afamiado y quería el otro q quedaba en el “tupper” … Al final Lauris tuvo q ceder y darle la mitad, jajaja. ¡Cuánto echaba de menos las “peleas” de Sergio con la comida!

Como todavía era temprano, Sergio se empeñó en q acudiésemos al bar de Lauris y el, el buque insignia de los bares de barrio q han de hacer oficial para cuando se quede para tomar algo, uno situado en la carretera Asturias del q no recuerdo su nombre. Hasta allí q fuimos caminando x la solana, subiendo cuestas x el barrio de San Esteban… Llegamos y nos pusieron unas tapas muy ricas y a un precio espectacular, es normal, pues es un bar de barrio y no en pleno centro con precios abusivos… Es probable q podamos volver a este sitio más veces, se estaba genial en la terraza

Al recogernos de nuevo cada uno para nuestra casa (bueno, yo no iba para casa debido a q continuaría mi ruta de la nueva normalidad para ver a más amigos y así aprovechar el día), les enseñé a Lauris y Sergio una de las cosas más peculiares de la calle Maestro Uriarte, q yo al descubrirla tuve q acudir a verlo in situ xq no me lo creía. Algunos bordillos de esa calle, cerca de las tan famosas escalerillas de colores, están realizados con antiguos trozos de lápidas, donde pueden verse apellidos, iniciales de nombres e incluso años de defunción o nacimiento… Todo un descubrimiento muy curioso q si desconocéis, os animo a q vayáis a verlo con vuestros propios ojos…

Lo dicho, q en breve volveremos a quedar y seguiremos pasando un buen rato. ¡Me alegró mucho poder veros!

PD: Sergio, ya sabes q yo puedo hacerte de “personal shopper”, “peluquero púbico” y más cosas, no dejes de preguntarme x todo 😉