martes, 3 de octubre de 2017

ViSiTaNDo PoRTuGaL: CoíMBRa…


Estas han sido mis “pequeñas” vacaciones, después de un año duro, q mejor manera de disfrutar q yéndose al país vecino para poder visitar lugares q desconocía. Ese ha sido uno de mis primeros destinos, la ciudad universitaria de Coímbra

El día al principio no acompañaba mucho, estaba nublado, algo típico pensé de esa zona de Portugal, pero con una temperatura agradable. Coímbra es una ciudad q se puede recorrer fácilmente en un día, y su centro histórico se resume principalmente a la zona de la universidad. Su campus es una auténtica gozada

Me llamó mucho la atención la plaza del 8 de mayo con su iglesia de Santa Cruz. Lo q me he dado cuenta en esta visita a Portugal, es q el interior de algunas iglesias, ya sea x aparentar, abusan descaradamente del pan de oro, esa pintura dorada q se aplica a los retablos para parecer oro puro… Eran verdaderas joyas en cuanto a ese sentido se refiere. Continuando x la calle Rua Visconde da luz, y atravesando el arco de Almedina, callejeando se llegaba hasta la catedral vieja (Sé Velha) donde su claustro, merece la pena ser visitado. Si no te apetece pagar x estar dentro, puede verse desde un mirador... Sus escalerillas se agradecían, ya q toda la ciudad es un continuo subir y bajar cuestas… Como les gusta a los portugueses las ciudades en colinas, jejeje. Para alguien de León, donde siempre he visto a mí querida catedral majestuosamente en la plaza de la Regla, cualquier catedral q se ve x ahí, no llama la atención, pero bueno, ahí estaba

De ahí al Palacio dos grilos son dos pasos, pero subiendo una rampa… Cuando uno llega a la plaza de Porta Ferrea, ya en pleno casco universitario sabe q ha coronado la cima, ya q ahí se encuentra el mayor monumento de la ciudad, el edificio de la Universidad de Coímbra. La mezcla de turistas con alumnos no deja de ser chocante, ya q puedes meterte en el edificio y asistir a los cambios entre clases y poder echar un vistazo a las centenarias aulas, en las cuales es todo un orgullo poder estudiar allí
Aquí uno puede echar el día, ya q se pueden visitar varias zonas, como: El museo de la Ciencia (laboratorio Químico), donde había una exposición sobre la luz. Merece la pena poder entrar y contemplar un laboratorio del siglo XVIII, con sus campanas extractoras, sus poyatas con fregadero… Un lujo, desde mi punto de vista. Otra de las visitas es el colegio de Jesús, donde se encuentra tanto la oficina de Física (con un montón de artilugios) como la Galería de Historia Natural (con especies recogidas de África, Brasil y Goa tras las expediciones realizadas x la corona de Portugal en el Siglo XVIII), el Pazo de las Escuelas es otra de las visitas recomendables, ya q pueden visitarse la capilla de San Miguel, el palacio Real (lugar en el q se presentan las tesis doctorales de los alumnos con un ritual muy llamativo y q es un orgullo para la persona q lo realiza, ya q deben de ir vestidos con una capa y absolutamente de negro, fue muy bonito poder presenciar desde la balconada una tesis en directo), la torre (desde la q se puede admirar toda la ciudad), la biblioteca Joanina (máximo exponente del barroco civil portugués con unos 60.000 volúmenes de los Siglos XVI al XVIII y q pueden ser consultados a día de hoy y donde conviven una colonia de murciélagos para proteger los libros de los insectos) y el precioso Jardín Botánico (donde se reúnen colecciones botánicas únicas para la enseñanza, la investigación y el respeto x la biodiversidad)

En el propio campus se encuentra además la catedral nueva (Sé Nova). No sé cuántas facultades tendrá esta ciudad, pero la de ciencias, medicina, letras, ciencias y tecnología, matemáticas, derecho y farmacia son algunas de las q encontré. Bajando x la calzada Martim de Freitas se puede comprobar q esta ciudad también posee un antiguo acueducto, no es como el de Segovia, pero ahí está


Para poder terminar el día, una de las mejores cosas q puede hacer uno es pasear x los parques paralelos al rio Mondego, donde el buen día y el sol de media tarde, hicieron q me llevara una sensación muy buena de esta ciudad q desconocía. Todo un acierto haberla visitado