Nuevamente el día de hoy iba a
transcurrir x la ciudad de Oporto, q tiene muchas cosas q visitar y ver. Hoy el
día iba a estar destinado a visitar el palacio de la Bolsa, una visita
imprescindible ya q el edificio x dentro es una pasada, sobre todo el salón
árabe, la última sala x visitar y a la q todos dejó impresionado, a mí el
primero, no me lo esperaba, la verdad. La suerte también de poder hacerlo con
la visita guiada en español, q quieras q no, siempre se agradece
A escasos metros de allí se encuentra
la iglesia de San Francisco, creo q es la más bonita q hay en la ciudad, x lo
menos su interior. La entrada incluía además la entrada al museo y las
catacumbas, donde se pueden ver un montón de nichos y hasta un osario en el q
no sabría decir la cantidad de huesos q allí hay… Centenares de personas yacen
bajo esos suelos…
Al salir de aquí, volví a callejear x
las calles de Oporto, para poder terminar en el paseo del rio, y para hacer
algo obligado en esta ciudad, visitar una bodega. En esta ocasión no fui a las
bodegas Croft, como hicimos hace años. La idea era visitar las bodegas Sandeman,
pero los precios hicieron decantarme x las bodegas Calem. El precio era de 10
euros, pero x 15 euros, había una cata con tres vinos… Me decanté x esa
La bodega Calem me gustó. Muy modernas
las instalaciones en la q explicaban la procedencia de las uvas, los valles del
Duero, el suelo donde crecen las vides, el tipo de uva usada, una “cata” de
olores para distinguir los aromas del vino… Y lo mejor, la visita guiada, también
en español, de las instalaciones. Aunque me resulto muy corta, el chico lo
explicó muy bien y luego procedimos a la cata. En mi caso, un vino blanco, un
joven de 3 años y un reserva de 10. Mientras, el chico nos iba explicando al
resto, como poder disfrutarlo. El hecho de no haber comido nada en horas hizo q
al tercer sorbo ya estuviera achispado, jajaja
Como ya no eran horas para comer, lo
mejor con ese calor era un helado, y menudo helado… En forma de pétalos de
flor. Escogí el helado de tres sabores, pero el tendero me comentó si lo quería
de más… Podías pedirlo de 12 sabores si querías, ya q al ser pétalos… Podías
escoger entre las decenas de sabores q disponía la heladería. Muy rico el q me
comí, de tarta de queso, vainilla y tiramisú. Para chuparse los dedos y lo q no
son los dedos, jajaja
Como viene siendo de rigor en todos
mis viajes, si veo una tienda friki, tengo q comprarme un juego de mesa… Como
no encontraba ninguna tienda mientras callejeaba, fui yo en su búsqueda. Y como
no, entre varios juegos q vi y q me hubiera encantado comprar, me decante x “Exploding
Kittens”, algo así como evitar q los gatos exploten… Veremos q tal está
Después de esta caminata, llegue hasta
el Palacio Da Música, un edificio poliédrico q sin dudas, es el mejor ejemplo
de modernidad en la ciudad. Me gustó la explanada donde estaba ubicado, cerca
de la plaza de Mousinho de Alburquerque, con la famosa columna a los héroes de
la guerra peninsular
Esto fue lo último q vi de esta
preciosa ciudad, si vuelvo, no dudaré en visitar el museo de la fundación Serralbes