Después de unos días de espera e
incertidumbre, en los q se llegó a pensar incluso q podría estrellarse en
España, el laboratorio espacial chino Tiangong-1 ha caído x fin esta
madrugada. La mayor parte de la plataforma se ha desintegrado en su
reentrada debido al elevado calor generado x el roce con la atmósfera
Los cálculos sobre la zona y la hora
de la reentrada habían variado ampliamente en las últimas horas debido a q
el laboratorio espacial estaba fuera de control y sin comunicaciones, x lo
q todas las estimaciones eran aproximadas. El seguimiento de las agencias
espaciales de todo el mundo se ha realizado x radar
La Fuerza Aérea estadounidense, q
rastrea y detecta todos los objetos artificiales q se encuentran en la órbita
de la Tierra, ha confirmado el reingreso, al igual q Australia, Canadá,
Francia, Japón, Alemania, Italia, Japón, Corea del Sur y Reino Unido (¿y España,
hacia dónde miraba?)
Al estrellarse en el agua, no se han
producido ni daños materiales ni víctimas. Ya se había avanzado q las
posibilidades de q algún fragmento no desintegrado cayera en una zona habitada
y provocara algún tipo de daños eran mínimas
El Tiangong-1 (cuyo nombre significa “palacio
celestial”), tenía diez metros de largo y 8,5 toneladas de peso, y había
sido puesto en órbita en septiembre de 2011. Tras ser visitado x seis
astronautas en dos misiones espaciales chinas, en 2012 y 2013, realizó tareas
de investigación hasta quedar fuera de servicio en 2016
En realidad es un peso ligero si se
compara con otras plataformas orbitales. La soviética Mir, q cayó y se
desintegró en 2001, pesaba 140 toneladas, mientras q el laboratorio
estadounidense Skylab (q cayó en 1979) pesaba cerca de 80 toneladas. Como
comparación, la Estación Espacial Internacional (ISS) pesa unas 420
toneladas
Menos mal q no nos cayó en el cogote…