"Mi hija
Paula nos dejó en 2014. Tenía sólo cinco añitos y medio y fue uno de los
100.000 fallecidos x cáncer q hay cada año en España". Así empieza la petición en la plataforma de change.org q ha lanzado
Inocencio Alarcón Peña para q se incluya una casilla para la investigación
contra el cáncer en la declaración de la renta
Inocencio y
su mujer crearon la petición hace más de dos meses, en el aniversario del fallecimiento
de su pequeña Paula. En este tiempo la petición cuenta ya con cerca de 300.000
firmas. Paula falleció a los cinco años, después de pasar cuatro "librando
una desigual lucha contra esta enfermedad". Durante el tiempo q sus padres
estuvieron repartiendo sus días entre el Hospital Materno Infantil de Málaga y
el Hospital del Niño Jesús en Madrid, convivieron con la angustia de muchos
enfermos de cáncer y sus seres queridos
X eso Alarcón
inició esa campaña para q en la declaración de la renta exista una casilla para
q su dinero vaya destinado a la investigación contra el cáncer, del mismo modo
q se da la opción de marcar la casilla de la Iglesia o Fines Sociales.
"Imagina q lo consiguiéramos. Imagina lo q podríamos hacer si España diera
este paso. Nuestro país se convertiría en un ejemplo a nivel mundial en la
lucha contra el cáncer y, al mismo tiempo q salvamos vidas, estaríamos atrayendo
talento, permitiendo q algunos de los mejores médicos y científicos lucharan
contra esta enfermedad desde nuestro país. Dicen q para avanzar, nuestras
sociedades y economías deberán estar basadas en el conocimiento", se lee
en la petición
El Centro
Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) apoya esta iniciativa ya q representaría
un importante impulso a la investigación de la enfermedad, según fuentes del
centro. Si esto se hace realidad, supondría un importante incremento en el
acceso a los recursos, pero también una herramienta para dar mayor visibilidad
a la importancia de la investigación para conseguir una mayor supervivencia de
los pacientes
El CNIO
cuenta con unos 21-22 millones de euros anuales de financiación pública directa
del Estado y con una cantidad similar procedente de fondos competitivos. Hay un
10% del total del presupuesto q proviene de actividades de innovación. Sin
embargo, la investigación no es suficiente, aseguran desde el centro. Según
datos de la “European Science Foundation”, el gasto público en investigación
biomédica en Europa es tan solo de 42 euros x persona al año. Esta inversión se
contrae año tras año
En cuanto a
la financiación privada en I+D+I, la situación tampoco es mejor ya q en nuestro
país representa el 53% frente al 90% de Japón, x ejemplo. Iniciativas como la
de change.org ponen sobre la mesa el deseo de muchos ciudadanos de
escoger el destino de sus impuestos. En 2014, 5,6 millones de españoles no
marcaron ni la casilla de fines sociales ni la de la Iglesia en sus
declaraciones. Tal vez muchos de ellos tacharían la hipotética casilla para la
investigación contra el cáncer para impulsar la lucha contra esta enfermedad