Esta plaza, la Plaza Mayor de León es el lugar en el q
tiene acto de presencia como cada viernes Santo, la procesión más importante de
nuestra Semana Santa, la de “El Encuentro” (declarada de Bien de Interés
Turístico Internacional). Abarrotada de fervorosos devotos, creyentes y de
multitud de turistas q madrugan mucho para poder tener un buen sitio en la
plaza y donde los más pudientes pagan un dineral para verlo en los balcones de
alrededor de la plaza…
Este es el aspecto de esta en el año 2020,
absolutamente vacía debido al estado de alarma en el q llevamos inmersos desde
hace 27 días en nuestro país. No soy un fiel seguidor de estos actos, pero
reconozco q suponen para la ciudad de León un importante revulsivo económico,
donde hosteleros, hoteleros y comerciantes ven en el tirón q supone la Semana
Santa, uno de los mayores impactos económicos del año y en este, todo eso se ha
esfumado, al igual q la actividad en muchos otros servicios. Somos todos
conscientes de lo q esto supone para muchas familias, x eso cuando esto acabe,
yo seré uno de los ciudadanos q llenaran las terrazas de los bares, los
comercios locales y disfrutará de las maravillas q tiene esta provincia, entre
todos saldremos adelante, ¡claro q sí!
Hoy las cifras del avance de este virus en el país han
dado un pequeño respiro, ya q han perdido la vida 605. Es la cifra más baja
desde hace unos cuantos días (desde el pasado 24 de marzo creo) y eso quizás
nos muestre q van bajando los niveles de contagio, ya q 4.576 son las afectadas
de ayer a hoy, sumando un total de 157.022 personas. El lado bueno, como
siempre viene acompañado del número de altas, 55.668 personas han conseguido
superar la enfermedad. ¡Un fuerte aplauso a todos esos valientes!
Yo continuo con mi lectura de Harry Potter mientras la
tarde amenaza tormenta y caen ligeramente unas pocas gotas sobre el asfalto de
la calle, la verdad q me está gustando mucho el libro de los pocos capítulos q
llevo leídos, está muy interesante, a ver si lo termino antes de q finalice la
semana. Me cae mal el Sr. Cornelius Fudge y la Sra. Dolores Umbridge. ¡Un tortazo
en toda la boca y se terminaba la tontería!
¡Gente, a tachar un día más del calendario!