Hace 75 millones de años, la Tierra
estaba poblada, entre otras criaturas fantásticas, x un animal singular:
un dinosaurio con cuello de cisne, aletas delanteras con forma de alas y garras
poderosas. Esta mezcla extraña le dotaba de unas características especiales q
le permitían dominar el aire, la tierra y, sobre todo, el agua. Volaban,
corrían y nadaban. Y lo hacían, al menos, en una zona del planeta q hoy
corresponde a Mongolia. Allí es dónde se halló el esqueleto fosilizado de una
de estas criaturas extrañas q se acaba de bautizar como “Halszka”
Con él se inaugura un nuevo
género y especie de dinosaurio del Cretácico. El nombre y apellido completo de “Halszka”
es “Halszkaraptor escuilliei” y es descrito en la revista “Nature” x
científicos europeos del Instituto Natural de Ciencias de Bruselas y del Museo
Geológico Capellini de Bolonia
“Halszka” fue descubierto en Ukhaa Tolgod,
en el desierto del Gobi q es también uno de los yacimientos fósiles más ricos
del mundo. No solo es una zona apreciada x los paleontólogos también lo es x
los cazadores furtivos de tesoros. El fósil con el esqueleto del
tatarabuelo de los cisnes fue víctima de las mafias q trafican con fósiles
y exportado de manera ilegal. Pasó x varias colecciones privadas en
varios puntos del planeta hasta q fue adquirido en 2015 y ofrecido a un grupo
de paleontólogos para su estudio. Esa investigación es la q ha permitido
determinar q se trata de una nueva especie de dinosaurio. Ahora se plantea su
devolución al Gobierno de Mongolia
Aunque varios grupos importantes de
dinosaurios depredadores han sido descubiertos en Mongolia, “Halszka” no
parecía pertenecer a ninguno de ellos. Algunas de sus características más
genuinas están casi siempre ausentes en la mayoría de los dinosaurios y son
compartidas, sin embargo, con reptiles y aves q viven en ecosistemas acuáticos
o semiacuáticos. Uno de los investigadores del Museo Geológico Capellini al q
encomendaron su estudio, Andrea Cau, reconoce q la primera vez q lo
examinó, llegó incluso a cuestionar q se tratara de un fósil genuino y no
un puzle formado x restos de diferentes dinosaurios
Los “halszkaraptores” son únicos y lo
son xq ser un híbrido de otras especies. Su esqueleto comparte rasgos con
el velociraptor, como son sus garras asesinas en forma de hoz. Y también
con especies presentes en el mundo actual. Se ha identificado una malla
neurovascular en el interior de su boca similar a la de los cocodrilos modernos,
q sugieren q “Halszka” fue un depredador acuático
La investigación también ha permitido
deducir q en tierra caminaban sobre dos patas, con una postura similar a
la de las aves de corta estatura como los patos. En el agua, se servían de sus
aletas superiores para poder nadar de una forma similar a la de los pingüinos y
otras aves acuáticas. Su cuello de cisne les ayudaba a pescar dentro del
agua
Todos estos datos no han salido de la mera
observación del fósil. Los investigadores han podido conocer estos
detalles gracias a la utilización de una metodología de escáner sofisticada. Se
ha recurrido al sincrotrón del ESRF, el laboratorio europeo de radiación q
está en Grenoble (Francia). Con él se han podido obtener imágenes de alta
resolución y reconstruir el fósil en tres dimensiones revelando con asombroso
detalle partes del esqueleto q estaban casi fundidas en la roca, ayudando a
descartar q el extraño “Halszka” era un animal genuino y no un esqueleto falso
formado x partes de diferentes dinosaurios