Lo prometo. Será la última vez q
escriba sobre la teta derecha de Sabrina. Pero q se cumplan treinta años de
aquella Nochevieja televisiva de 1987 (convertida ya en episodio nacional)
merece una revisita. Habrá muchos españoles nacidos a finales de los 80 q se
pregunten q es eso del pezongate, quién es Sabrina Salerno y q clase de
país friki era la España del final de la Movida
Aclaremos algo: en esos tiempos era un
escándalo q un pecho se saliese de su sitio en plena gala de fin de año en TVE,
era un escándalo q un grupo de chicas punk vascas, las Vulpex, cantasen en
televisión “Me gusta ser una zorra” (el fiscal general se querelló y
el programa desapareció), y también era un escándalo q una bruja de nombre
Avería, y sus electro duendes, diesen clases de historia e hiciesen crítica
social en horario infantil (La bola de cristal sufrió tantas presiones q acabó
x esfumarse de la parrilla)
Dentro de unos días conmemoraremos los
treinta años de una imagen q paralizó España: el último día de 1987, una
cantante italiana nacida en la misma ciudad q Cristóbal Colón descubrió su teta
derecha sin querer mientras bailaba y hacía un falso directo de su
éxito Hot girl (no, no cantaba Boys, boys, boys. Es leyenda).
Aquellos segundos quedaron grabados a cámara lenta en el cerebro de muchos
telespectadores. Menos mal q no existían las redes sociales. Un pecho hermoso,
de piel morena, escapaba del corpiño blanco bamboleando como una fiera. El
vídeo está en “YouTube” (hay perturbados q hasta ralentizan la imagen y hacen
efecto zoom) y hoy podría funcionar como pieza de un video artista conceptual
Sabrina tenía 19 años y medía 1,75. El baby
boom made in 1968. Si soy sincero, no puedo afirmar q estuviese frente a la
televisión esa noche. Diré q sí, q fui uno más de los millones q contemplaron
aquella escena en directo, como también fui uno de los q observó en la
televisión cómo se estampaba el segundo avión contra una de las torres gemelas
catorce años después. ¿Q olvidará antes nuestra mente, la teta o el atentado?
España da la bienvenida, ya q era la
primera vez q Sabrina salía de Italia, donde compaginaba sus apariciones en
televisión y sus sesiones de modelo. El primer país en darle la bienvenida fue
el nuestro. Y ocurrió. Llevaba pocos segundos interpretando “Hot girl” cuando
en uno de sus espasmódicos bailes, el pecho derecho se salió del corpiño
blanco. Ella siguió con el playback y en más de cinco ocasiones tuvo
q subirse las copas de la prenda xq sus pechos no estaban hechos para ese
corsé. Era una profesional, nunca dejó de cantar y bailar. Aquel descuido elevó
su caché y fue contratada x doquier. La misma noche del Especial Nochevieja,
Sabrina actuó en un cotillón municipal en Bilbao. Cobró 3,5 millones de pesetas
(21.000 euros). Feministas lanzaron huevos y tomates y hubo algún altercado
entre sabrinistas y anti sex symbols. El ayuntamiento respondió q habían
contratado a la artista “xq es un personaje aceptado x la juventud con
gran poder de convocatoria, sin entrar en matizaciones estético-morales”
En 2012, Sabrina confesó q al terminar
de grabar la canción, el director de la gala comentó: “Tranquila, ¡no hay
problema! ¡No se ha visto nada!”. Sabrina se marchó y en marzo de 1988
coincidió con el realizador en Luxemburgo. “¡Iba directa a matarlo! Le
grité: ‘¡Tú, ven aquí, da la cara!’”. La cantante siempre ha sostenido q no
estaba preparado, q fue accidental. En la misma publicación reconoció q “era
muy, muy joven y no me esperaba nada de lo q pasó. Y sí, España fue realmente
el primer país donde tuve ese tipo de éxito. España me trajo mucha suerte.
Después llegó el éxito en Europa, Sudamérica, Australia, Inglaterra. “Boys,
boys, boys” forma parte de mi vida y gracias a ella me han pasado cosas muy
buenas