El
programa “Homemade Astronauts” (algo así como “astronautas caseros”) del canal “Science
Channel” (q se estrenará en 2020) tiene como objetivo grabar los esfuerzos
de civiles aficionados fascinados x el espacio. En esta línea, el próximo
domingo inmortalizará el intento de “Mad” Mike Hughes, un conductor de
limusinas, “temerario” y constructor de cohetes aficionado para alcanzar los
1.500 metros de altura. El artefacto, impulsado x vapor, ha sido probado
anteriormente en otro lanzamiento en el q Hughes consiguió llegar hasta
los 572 metros. La “misión” fue un éxito, si bien el “temerario” astronauta
(como él mismo se define) de 62 años acabó con magulladuras y una
vértebra comprimida
Según
se explica en su propio documental (llamado “Rocketman The Documentary”), la
motivación de Hughes es llegar a una altura tal q sea posible fotografiar
lo q él cree q es la Tierra: un disco plano en vez de una esfera. De hecho, la
comunidad “terraplanista” es una de sus mayores sustentadoras, habiendo
recaudado hasta la fecha casi 10.000 dólares para su propósito
Sin
embargo, en una de las últimas entrevistas q ha concedido afirma q aunque sigue
teniendo claro q la Tierra es plana, estas creencias no están ligadas a su
intento x llegar al espacio de forma “casera”” “Creo q la Tierra es plana (...)
Pero esto no tiene nada q ver con los lanzamientos de cohetes de vapor. Nunca
lo hizo y nunca lo hará. ¡Soy un temerario!”, explica
En
marzo de 2018, después de algunos intentos fallidos, Hughes, a bordo del
cohete, se lanzó con éxito hasta más de medio kilómetro de altura. En ese
momento, se desplegó el paracaídas y el cohete cayó en picado al suelo.
Sin embargo, sobrevivió, aunque fue sacado de la nave visiblemente afectado. Se
supone q el nuevo prototipo (q cuenta con una aplicación de citas “online” como
principal patrocinador) estará mejor preparado para la nueva y más peligrosa
misión
Se
trata de un nuevo paso para conseguir llegar hasta la línea Karman, el límite q
significa el comienzo del espacio (y q está a 100.000 metros). De hecho, para
conseguirlo, él y su compañero Waldo Stakes están desarrollando un “rock-oon”,
q es parte cohete y parte globo. Esencialmente, el globo se uniría al cohete y
llevaría a Hughes a una parte del camino, para luego disparar el cohete
impulsado x peróxido de hidrógeno y recorrer el resto de la distancia. Ambos
esperan tener listo este artefacto dentro de unos dos años, si bien antes
necesitan recaudar 2,8 millones de dólares