No es la luz de un amanecer corriente.
Este lunes León ha amanecido con un albor diferente, muy extraño, podríamos
decir q casi “extraterrestre”. Las primeras horas de la jornada se han teñido
de una niebla confusa, provocada x la mezcla del humo procedente de los
incendios q azotan la provincia leonesa y el norte de la península y algunos
coletazos del frente de fuertes vientos provocados x el Huracán Ophelia. Una
sensación q no sólo ha invadido la capital leonesa, sino q también se ha podido
apreciar en Astorga, Ponferrada, y en casi la totalidad de la provincia
Además del aspecto confuso del cielo
leonés, la atmósfera q se respira en la provincia leonesa también está cargada
de un fuerte olor a humo, a quemado
De esta forma, la luz de las primeras
horas de este lunes ha recordado los incendios q todavía arrasan Matalavilla,
perteneciente al municipio de Palacios del Sil, Silván, en el municipio caibreirés
de Benuza, q es el q presenta un estado más complicado, Chano, en Peranzanes y
otros controlados en Sosas de Laciana (Villablino) y San Martín de Moreda, en
Vega de Espinareda, q están calcinando una importantísima zona de ecosistemas y
amenazan a especies como la del oso y el urogallo. Otros de los fuegos q
contribuyen a esta situación de cielo gris y cargado de humo son los gallegos,
q contabilizan más de 105 focos activos, 17 de ellos considerados de nivel dos,
es decir, decretados de riesgo real para núcleos poblados
X otro lado, la mezcla con las nubes
provoca todavía un escenario más anómalo. Se trata del Huracán Ophelia
(temporal marítimo), un fenómeno meteorológico q también está provocando en
León fuertes rachas de viento, y cuya presencia en probablemente se calmará
durante la tarde de este lunes