¡Y después de haber dado tanto la
vara… X fin pudimos comer un rico cocido! Viva vivaaa, jajaja. Menudos lugares
a los q nos llevan Sofí… Si es q podría ser experta rutera en experiencias x la
provincia, jajaja. Conoce muchos restaurantes guais, x lo q no era de extrañar
q Casa Coscolo fuera a ser un mal lugar…
El restaurante no podía estar en un mejor
lugar, Castrillo de los Polvazares, en plena estepa maragata, jejeje. Me
encanta este pequeño pueblo, es una verdadera gozada, q bonito es, y más cuando
hacia un estupendo día de primavera en pleno febrero
La dueña del restaurante un encanto,
muy atenta con nosotros. El plato q elegimos era único, su cocido maragato, y
la verdad es q fue contundente, pero es una comida q presta mucho comer, me
encanta comer un buen cocido con su fuente con orejas de cerdo, tocino,
chorizo, morcilla, carne y dos pelotas de relleno, de gallina y la otra no
recuerdo, creo q era de verduras (las anfitrionas q me corrijan si me equivoco),
su otra fuente con una tonelada de garbanzos con berza, y x último, la sopa de
fideos
Mención especial son los postres. Las
natillas con mantecadas estaban buenas, pero sin lugar a dudas, el postre en mayúsculas
fue la tarta de queso con esos “peta zetas” de chocolate… Todavía sigo con la
boca abierta oyendo los chasquidos entre mis dientes… ¡Pum, pum pum!
Eso sí, quedamos extasiados de tanta
comida, creo q no vamos a comer cocido hasta la primavera, jajaja
Muchas gracias x esta mini tarde con vosotras,
para la siguiente a ver si puede estar el turno completo :)