sábado, 9 de marzo de 2019

PeÑaFieL I…


Costó organizar el viaje, concretar fechas y elegir destino, pero al final nos pusimos de acuerdo, y aunque no pudimos estar todos los q desearíamos, lo pasamos muy bien, q esa era la intención inicial del viaje

Lauris, Manu, Olguis y yo salimos de León y gracias a mi “atajo”, volvimos de nuevo para León, jajaja. Cuando nos ubicamos y tomamos rumbo a Peñafiel x la autovía del infierno (si, la León – Benavente en ambos sentidos), en apenas 1h 45 minutos llegamos a nuestro destino. Allí nos esperaba Tina, la dueña de la casita rural “La Casa del Coso”. La mujer fue muy maja y nos fue explicando las curiosidades de la casa, ubicada en plena plaza del coso. Íbamos a alojarnos en una plaza de toros, así de literal. En un principio todos pensamos q aquello no era buena idea, pero bueno, uno no siempre puede dormir en un sitio así… En verano, concretamente en las fiestas de San Roque, a mediados de agosto, las habitaciones q dan hacia el coso deben de abrirse al publico y en ellas, en vez de camas, se colocan gradas para q la gente, amante de la tauromaquia, disfrute de ese espectáculo

Tras ubicarnos, llegaron Kike, Nancy y Aira. Les enseñamos la casa y nos pusimos a preparar la cena. Una cosa esta clara, las reuniones con amigos no molan nada si uno no las hace en la cocina, me encanta poder charlar en ella mientras se cocina. No recuerdo a q horas nos pusimos a cenar, pero nos sentó de lujo. Como ya vamos siendo mayores (los 20 nos quedaron atrás hace bastante tiempo, jajaja), nos apalancamos en los sofás. Olguis estaba agotada, pero saco de la manga su altavoz inalámbrico para poder escuchar música y todos resucitamos, jajaja. La q más Aira, q nos descubrió a todos lo coqueta y los bailes de cintura q se marca ella sola, jajaja

También conocimos a Silvo, la marioneta de Aira. Las risas q nos echamos estando en los sofás todos juntos viendo como Olguis le ponía voz y hablaba con Aira mientras le cambiaba de nombre (Bilbo). Hay q ver lo q nos cundieron esas dos horas… Entre los bailes arriba y abajo, moviendo la cintura, saltando, dando sustos a Aira con Silvo… Acabamos derrengados, pero la pequeña estaba a tope, ni la epinefrina hace más efecto, jajaja

Cuando x fin nos decidimos a acostar, caímos como cestos. Ya a la mañana siguiente, y tras ducharnos en aquella angosta ducha de 60 x 60 cm, desayunamos, recargamos pilas y nos fuimos a visitar Peñafiel. Nuestra primera parada, en esta tierra de vinos, fue la bodega “Protos”. La visita guiada x sus instalaciones y la posterior cata, hacen q cada día me guste más y más el mundo q rodea al vino. La cata de un blanco, un crianza y un reserva fueron de lo mejor de a visita. Si alguien visita este lugar, parada obligatoria en este sitio. Tras la cata, y con el puntillo cogido (a mi me sube q da gusto, y encima sin apenas comer nada, solo con 4 rodajas de chorizo, 3 de lomo y de queso, pues salí de allí un poco serpenteante, jajaja) nos fuimos al restaurante “Luna”, donde pudimos degustar unos ricos platos de autor… Merece la pena el lugar, nos gustó mucho la comida q nos pusieron y q pedimos para compartir, como las alcachofas con huevos rotos, el risotto de lechazo, el wok de verduras y nuestro entrecot y tataki… Y de postre una rica mouse de tiramisú con pepitas de chocolate con peta zetas y una rica tarta de queso…

Con las barrigas llenas nos fuimos a visitar el monumento x excelencia de este lugar, su maravilloso castillo. Creo q aquí a Aira se le ha guardado un bonito recuerdo, xq no cabía mas felicidad en su rostro al poder estar en un lugar así, su primera visita a un castillo ha sido aquí. Emocionada no paraba de repetir q quería ver a la reina y al rey con la corona, a la princesa, al esqueleto del castillo… ¡Q bonita! Desde lo alto de la torre se contemplaban unas vistas geniales de toda la zona, merece la pena visitarlo. Tuvimos mucha suerte xq el día nos acompañó, nos hizo sol, calor… X lo q durante el anochecer, pudimos pasear x el pueblo visitando otros lugares… Q de bodegas y chimeneas hay x todo el pueblo, un detalle curioso q no había visto en ningún otro lugar

Cuando nos recogimos y nos fuimos para casa, tras preparar de nuevo la cena y descansar los pies de tanto tute q nos habíamos dado durante todo el día, Aira quería de nuevo fiesta… Atrás quedaron los “canta juegos”, ahora es fan de Shakira y demás perreo, jajaja. Es cierto q bailamos también en la noche del sábado, pero fue mucho mas liviana q la del viernes, todos caímos rendidos mucho más temprano, jajaja

PD: Lauris, si en la primera noche fui yo el q "respiró" más alto de lo normal mientras dormia, en la segunda tú te llevaste la palma, jajaja