Un desconocido objeto (otro) de “masa
planetaria” podría estar ocultándose en los bordes exteriores de
nuestro Sistema Solar, según afirma un grupo de investigadores de la
Universidad de Arizona tras analizar las órbitas de varios planetas menores. El
nuevo objeto, a no confundir con el famoso “Planeta 9” anunciado en 2016
pero aún no descubierto, estaría mucho más cerca de nosotros q ese otro
hipotético mundo aún sin confirmar. El trabajo acaba de publicarse en la
revista “Astronomical Journal”
U el estudio, presentan evidencias
muy convincentes de la existencia, más allá de Neptuno, de un cuerpo
planetario (q tampoco ha sido observado todavía), con una masa q estaría
comprendida entre la de la Tierra y la de Marte
El misterioso objeto, según los
autores de la investigación, ha revelado x ahora su presencia solo a través del
control q ejerce sobre los planos orbitales de una población de rocas
espaciales conocida como “KBOs”, u objetos del Cinturón de Kuiper, en las
gélidas regiones externas de nuestro Sistema Solar
Mientras q la mayor parte de los KBOs
(q son los escombros sobrantes de la formación del Sistema Solar) orbitan
alrededor del Sol con unas inclinaciones orbitales q no se salen del
promedio de lo q los astrónomos llaman “el plano invariable” de nuestro
sistema planetario, los objetos más distantes del cinturón de Kuiper se comportan
de un modo muy diferente
De hecho, las órbitas se inclinan,
como media, hasta unos 8 grados con respecto del plano invariable. En
otras palabras, algo de origen desconocido está alterando el plano orbital
promedio en el sistema solar exterior
La explicación más probable para estos
resultados es q ahí se oculte una masa nunca vista hasta ahora. Según
nuestros cálculos, se necesita algo q sea x lo menos tan masivo como Marte para
causar las desviaciones q se están observando
El cinturón de Kuiper se encuentra más
allá de la órbita de Neptuno y se extiende a lo largo de algunos cientos de
Unidades Astronómicas (UA). Una UA equivale a la distancia media entre la
Tierra y el Sol, cerca de 150 millones de km. Y, lo mismo q sucede con su “primo”
del Sistema Solar interior, el cinturón de asteroides q hay entre las órbitas
de Marte y Júpiter, también el cinturón de Kuiper alberga un gran número
de planetas menores, la mayoría de ellos pequeños cuerpos helados (precursores
de cometas), y una pequeña población de planetas enanos
Los datos de los investigadores descartan
x completo la posibilidad de q el objeto q se postula en este caso sea en
realidad el hipotético “planeta 9”, cuya existencia fue sugerida en base a
otras observaciones x completo diferentes. El planeta 9, además, sería
mucho más grande (alrededor de 10 masas terrestres) y estaría mucho más
lejos, a entre 500 y 700 Unidades Astronómicas de distancia
Sin embargo, y dado q, x definición,
un planeta sólo puede llamarse así si ha conseguido “limpiar” su órbita de
planetas menores, como son los KBOs, los autores se refieren, cautelosamente, a un
objeto de “masa planetaria”. Y los datos no excluyen incluso la posibilidad de
q la desviación detectada en los KBOs sea el resultado de la acción de más de
un solo objeto
¿Xq no se ha encontrado aún ese nuevo
mundo? La razón más probable es q aún no hemos explorado todo el cielo en
busca de objetos lejanos en el Sistema Solar. X ejemplo, la zona más
prometedora para encontrar un planeta oculto estaría en el plano galáctico,
pero esa región está tan densamente poblada de estrellas q los investigadores
tienden a evitarla cuando programan sus búsquedas
Sea como fuere, parece q nuestro
Sistema Solar podría estar mucho más poblado de mundos de lo q creíamos. Planeta
9, planeta 10... ¿Quién da más? Los números podrían, en solo unos años, crecer
hasta cifras q hoy nos resultan difíciles imaginar…