lunes, 22 de abril de 2019

eL PaDRe Q aVeRGoNZo a SuS HiJoS…



Jeremiah Peterson, un estadounidense de 40 años y padre de tres niños, se ha hecho conocido en las redes sociales x su increíble transformación física al perder 40 kilos en poco más de cinco meses. No solo x eso, sino x el motivo de tan arduo esfuerzo, q no es otro q sus más allegados

Al darse cuenta de q su familia se avergonzaba de él cuando pesaba más de 130 kilos, Peterson decidió comenzar este desafío con su cuerpo (y su salud). “Mi esposa y mis hijos me llamaron un día para q les fuera a ayudar xq se les había estropeado la bicicleta. Salí a toda prisa olvidándome de ponerme la camiseta. Cuando me bajé del coche me di cuenta q todo el mundo podría ver mi inmensa barriga y sentí lo avergonzada q se sentía mi familia al verme así. No había pensado mucho en mi aumento de peso hasta ese momento", comentó el padre de familia

Entonces, decidió ponerle remedio y, a través de su cuenta de “Instagram”, fue publicando los avances q se producían en su cuerpo. Combinando una estricta dieta cetogénica y ejercicio intensivo y regular, el hombre, q vive en Montana con su familia y trabaja en una tienda de antigüedades, comenzó su particular transformación

 Durante cinco meses pasó dos horas saliendo de excursión y una hora diaria en el gimnasio. De esta forma, Jeremiah perdió 37 kilos y, con ellos, varias tallas de pantalón. "Pasé de tener un auténtico cuerpo de padre a tener el físico de un universitario" aseguró el americano

"Desde q adelgacé, todo ha ido mejor. Mi pelo y mi piel están más sanos, se me ve la mandíbula en vez de mis mejillas rollizas y hasta tengo abdominales". X todo esto, Peterson se ha convertido en un ejemplo a seguir para sus seguidores, q se cuentan x miles en “Instagram”. "Todos podemos encontrar un motivo en nuestro corazón para comenzar a vivir de forma más saludable

Y yo digo: ¿En serio los hijos se avergonzaban del físico de su padre? Q se haya puesto en forma para estar más saludable, no me parece mal, pero q a sus hijos le diera vergüenza su barriga… En fin