Kiel, capital del Estado federado de
Schleswig-Holstein, el más septentrional de Alemania, ha puesto a la venta x
2,5 euros una contradicción en términos: el billete de cero euros. Sin valor
real pero con el visto bueno del Banco Central Europeo (BCE) e igual en
apariencia de los q sí lo tienen (aunque con un 0 estampado en el lateral), la
ciudad portuaria de Kiel ha impreso como recuerdo turístico una edición
limitada de 5.000 ejemplares y se los han quitado de las manos en menos de 24
horas. Se pueden reservar billetes para una segunda edición, q estará
disponible en cinco semanas
En el reverso, un collage con varios
de los principales monumentos europeos, como la puerta de Brandemburgo de
Berlín, el coliseo romano, la torre Eiffel de París, la Sagrada Familia de
Barcelona o el Manneken Pis de Bruselas. En el anverso aparece el buque escuela
alemán Gorch Fock II en el puerto de Kiel, a orillas del mar Báltico. El buque,
construido en 1958 y e tiene su base en Kiel, ya lució entre 1961 y
1990 en los billetes de 10 marcos alemanes
La moneda está dirigida a
coleccionistas y turistas del Estado de Schleswig-Holstein. Se trata de un
billete auténtico impreso en papel moneda de euro real con los mismos elementos
de seguridad de cualquier otro (sello holográfico, elementos en relieve, hilo
de seguridad de cobre, marcas de agua y número de serie). La única diferencia
es q su valor es netamente simbólico. El billete, de color violeta y
de 135 milímetros x 74, no posee ningún poder adquisitivo y x tanto,
no es válido en transacciones comerciales pero sí es un de curso legal
gracias a la autorización expresa del BCE
Durante mucho tiempo fue considerado
un mito el billete de cero euros. X tanto, este raro ejemplar, realmente
genuino, tiene una gran demanda entre los coleccionistas. Para lograr q fuera
un billete real, aunque de valor cero, se elaboró un proyecto de ley, el Der
Null-Euro-Schein richte, q ha logrado el visto bueno del BCE
No son ni mucho menos los primeros
euros de coleccionista, pero hasta ahora habían sido monedas. En abril de 2016,
Alemania emitió dos millones de unidades de una moneda de cinco euros, llamada
Planeta Tierra. Bélgica también acuñó una pieza de coleccionista de 2,5 euros y
en España, de 12