Tengo
q reconocer q con la ciudad de Bilbao me pasa algo q no puedo explicar… ¡Me
encanta! Me parece una ciudad preciosa, sostenible, moderna, eficiente, q ha
sabido transformarse, reinventarse… Es un ejemplo de ciudad a seguir, ¡q
gozada!
X
eso, la visita de la ciudad con Ibán y con sus compañeros del coro fue muy
emotiva, xq pudimos visitar lugares emblemáticos como el museo Guggenhein, el
mirador de Artxanda, montar en el funicular, la plaza nueva con sus bares de
pintxos, perderse x las siete calles, el teatro Arriaga, pasear al lado de la
Ría, ver el ayuntamiento, la zona de Moyúa… Bilbao está genial
El
restaurante al q fuimos a comer, “el carbonero”, también estuvo bien, aunque si
hubieran quitado el aire acondicionado del modo huracán y la comida nos la hubieran
servido antes de las 18h, hubieran quedado de lujo, jejeje, pero bueno, no se
le puede pedir nada más, xq aunque la espera fue larga, el entrecot q comí,
estaba muy bueno
Un
domingo estupendo en compañía de gente divertida, amigable y sensacional 😉